Transición defensiva. Trabajo de presión tras pérdida
29 de Diciembre de 2017 a las 11:28

Cuando un equipo pierde la posesión del balón, puede optar por
temporizar esperando a que lleguen ayudas de compañeros a esa zona, retroceder
a su portería porque pueden verse sorprendidos por el ataque rival, o realizar
una presión intensa en la zona y en el momento dónde han perdido el balón, con
el objetivo de impedir que el rival pueda progresar y volverse a hacer con el
control de éste.
En este post nos vamos a centrar en el trabajo de presión inmediata cuando el equipo pierde la pelota. Pensamos que optar por esa solución cuando perdemos la pelota es lo más correcto, para impedir al rival poder progresar y podernos hacer nuevamente con el control del balón rápidamente, ya que sometemos al rival a una fuerte presión.
En los momentos de transiciones entre ataque-defensa, es cuando un equipo está más expuesto a ser sorprendido por el rival, que aprovecha esos momentos de desorganización entre el momento en que se tiene el balón y cuando se pierde, para atacar y encontrar espacios.
Por eso hay que tener muy en cuenta trabajar esta fase con nuestros equipos. Para ello, os dejamos lo que consideramos unos puntos clave para trabajar la transición ataque-defensa:
- Primero de todo, debemos tener en cuenta una serie de variables: características del rival que tenemos delante, momento del partido y qué resultado hay, zona del campo donde se ha perdido el balón. Tener información del contexto nos ayudará para decidir y escoger los momentos adecuados a poder realizar esa presión rápida y adelantada tras pérdida.
- El equipo, cuando tiene el balón, debe tener jugadores que no están orientados a participar en el juego, preparados para poder defender rápidamente, si hay una pérdida de balón. La transición defensiva empieza por una buena organización en ataque que no deje al equipo desprotegido atrás, buscando un equilibrio colectivo.
- El jugador que pierde el balón es el primero en reaccionar en busca de volver a recuperarlo de nuevo.
- Los jugadores cercanos al balón ayudaran a su compañero, buscando superioridad en la zona donde se ha perdido el balón. Orientarán al rival a zonas exteriores del campo.
- Los jugadores más alejados, cerrarán espacios a la espalda de los jugadores que están realizando la primera presión. Preparados para ayudar si el equipo rival supera esa primera presión. Siempre debemos tener jugadores en cobertura, que cierren espacios ante la posibilidad de que el rival avance.
- No hacer faltas, si no hay peligro de ser superados. Cometer una falta en una situación donde el rival está sin salida y puede perder la pelota, es darle ventaja.